La columna vertebral de los mamíferos esta compuesta por cuatro segmentos: Cervical, Torácico, Lumbar y Sacro. Cada segmento consta de un número determinado de cuerpos vertebrales, así vemos que el segmento cervical tiene 7, el segmento torácico tiene 12, el segmento lumbar tiene 5 y en raros casos 6 y el segmento sacro tiene 5.
El hombre posee a nivel de la columna vertebral 4 curvas en el plano sagital (perfil), que nos permite mantener la posición de bipedestación; estas curvas son: lordosis cervical, cifosis torácica, lordosis lumbar y cifosis sacra; por esta curvas es que el hombre puede mantener la posición de bipedestación con un consumo mínimo de energía.
Esta es la gran diferencia con los monos, ya que estos solo tienen una gran curva cifótica, por lo que estos mamíferos pueden erguirse durante cierto tiempo pero se cansan y tienen que volver a caminar con sus cuatro extremidades.
En el plano frontal (frente), no deben existir curvas debido a que en la verticalidad “absoluta” es que existe un menor consumo energético, pero la perfección en el ser humano no existe por lo que siempre presentamos ligeras desviaciones hacia un lado, permitiéndose variaciones normales de hasta 10°, cuando hay un aumento de estos grados podemos presentar inicialmente “actitudes escolióticas”, o sea desviaciones que no tienen alteración primaria en la columna. Si no corregimos estas actitudes si pueden comenzar a producir en la columna “rotación” de los cuerpos vertebrales o sea daño orgánico y entonces estaríamos en presencia de ESCOLIOSIS. La escoliosis es un termino que usualmente no esta bien usado, y solo debemos referirnos a el cuando se comprueba desde el punto de vista radiológico la rotación de los cuerpos vertebrales.
Cada persona posee su propia postura por la existencia de características propias, como son:
- Contorno corporal
- Laxitud ligamentaria
- Tensión de los músculos y aponeurosis
- Potencia muscular
- Inclinación de la pelvis
Dependiendo de la posición de la cabeza, hombros, pelvis, caderas, y tobillos durante la bipedestación, podemos determinar cuatro tipos de postura:
- Excelente o postura casi perfecta
- Satisfactoria pero no ideal
- Insatisfactoria pero no la peor posible
- Mala, posiblemente patógena
La postura insatisfactoria en niños debe identificarse y corregirse para mejorar la potencia del dorso, de manera que durante la adultez, tenga menos susceptibilidad al cansancio, a las sobrecargas del dorso, y de esta manera disminuir la posibilidad de lesiones.
El morral escolar o también denominado: mochila, constituye una forma practica y rápida de que nuestros niños lleven la gran cantidad de útiles escolares exigidas en los colegios, sin embargo muchas veces el remedio es peor que la enfermedad, debido a que no presentan una postura satisfactoria y por la gran incidencia de dolor de espalda.
Diariamente vemos a nuestros pequeños niños mas parecidos a San Nicolás, por el gran morral que llevan sobre sus espaldas, y debemos preguntarnos si esta sobrecarga de peso no puede producir lesiones en el sistema músculo esquelético del niño. Se han realizado diversos estudios que plantea esta interrogante y así tenemos que estos estudios arrojan los siguientes resultados:
El peso del contenido del morral mas el peso del propio morral no debe exceder del 10% al 15% del peso corporal del niño, así pues si un niño pesa 20 Kg, el morral no debe pesar mas de 3 Kg.
Los libros más pesados deben estar ubicados en la zona más cercana a la espalda.
El material de construcción de los morrales debe ser resistente, pero no muy pesado, y con compartimientos, de manera de permitir un mejor distribución de los útiles en su interior.
Las correas deben ser dos, de manera que debe ir una a cada lado de los hombros, deben ser gruesas y de material suave y acolchado, si es posible añadir un cinturón que fije el morral y se amolde mejor a la anatomía del niño mucho mejor. En ningún caso se recomienda usar el morral con una sola correa.
Las correas deben ser largas, de manera que el peso descanse sobre la zona lumbar y no sobre la zona dorsal.
En realidad no existen estudios que demuestren causa efecto del uso del morral y la incidencia de escoliosis, lo que si es cierto es, que la gran cantidad de niños con dolor lumbar se debe al uso inadecuado del morral, además de las posiciones inadecuadas que producen tensión muscular a nivel de cuello, hombros, región dorsal y lumbar; lo cual ocasiona que el niño se sienta incomodo y aumente las horas de deserción escolar, ya que los padres se angustian y acuden a la consulta del ortopedista tratando de encontrar la razón por la cual sus hijos presentan dolor y/o mala postura.
El futuro de nuestros niños recae sobre sus hombros y esta ya es una carga bastante grande, como para que además tengan que sobrecargar su espalda con la gran cantidad de útiles escolares, por lo que es nuestra responsabilidad aliviar esta carga. Una forma pudiera ser dependiendo de las áreas físicas de la institución educativa la implementación de armarios o lockers escolares, para que los niños puedan dejar los libros en la institución y no tengan que llevarlos todos los días a casa, solo llevaría el que necesite para realizar las tareas del día.
Otra forma seria la implementación de bibliotecas bien dotadas y con horarios flexibles para que el niño tenga acceso a ella y pueda consultar los libros de texto diario y de temas especiales para la realización de sus actividades.
En la actualidad la informática y la computación constituyen un gran avance para la educación, sin embargo el alto costo y poca accesibilidad de la mayor parte de nuestra población, representan un obstáculo como para pensar en textos digitalizados y en el acceso a Internet, lo cual representaría una solución al uso de morrales pesados.
Por último el uso de bolsos con ruedas, es una bueno opción para aliviar la tensión de la espalda, pero pudieran surgir otro tipo de problemas como: Bursitis del hombro, subluxaciones del hombro y/o codo, lesiones tendinosas etc, en síntesis el problema es complejo, la solución no es fácil, pero tenemos que insistir en lograr instituciones educativas bien dotadas y con facilidades de todo tipo, porque ese es el futuro y nuestros niños y adolescentes tienen todo el derecho de crecer con un futuro digno, seguro y promisor.
Si su hijo comienza a presentar problemas ortopedicos por el uso de su morral o mochila, no dude en consultar con un Ortopedista infantil y asi realizar un tratamiento oportuno.